River's Pinball

Ay mis niños, es hora de que os enseñe a jugar a un juego divertidísimo que hará que dejéis de pasar el tiempo veraniego urgándoos el ano y que os enseñará un par de verdades sobre esta vida tan difícil y confusa que todos padecemos. Se llama el River's Pinball.

Para jugarlo hacen falta de 4 a 8 jugadores y un Rivers. Si hay menos de un Rivers pasa como con la vida entonces, que carece de sentido. Si hay más de un Rivers llamadnos y nosotros liquidaremos a todos los impostores y se los daremos de comer al Auténtico. Los jugadores pueden ser de cualquier sexo, pero las chicas deberían de ser avisadas con antelación de la particular forma de tratarlas que tiene el de los Rivers, a menos que la gracia consista en no avisarlas.

Las localizaciones preferentes del juego son los autobuses que van y vienen a Sanlúcar y la estación de autobuses de Jerez de la Frontera, pues allí el clima, el aburrimiento y la inclinación del terreno hacen que la Bola de este extraño Pinball ruede mejor.

Este juego casi siempre va precedido de una Búsqueda del de los Rivers, que se suele dar en compartimentos cerrados, sobre todo en autobuses, y sobre todo con el de los Rivers claramente a la vista. Estas Búsquedas pueden durar horas, y os preguntaréis por qué, pero tranquilizaos, mis pasionales chiquillos, que algún día os contaremos cómo jugar con detenimiento, preferentemente cuando os hayáis aburrido del River's Pinball y volváis a las aventuras anales.

La mecánica del juego que nos ocupa es la siguiente:

Los jugadores se colocan formando un corro alrededor del Rivers en cuestión, pero sin darse la mano ni mariconadas del estilo, sino bastante separados. Uno, el Cabecilla, hace como que otea el horizonte de cara al Rivers, aunque éste probablemente se encuentre a menos de un metro de sus ojos entornados. Entonces grita: "¡¡¡¡¿El de los Rivers?!!!!", y todos deben responderle mirando en derredor, descubriendo que sorprendentemente el estrafalario Rivers se encuentra ahí en medio y pasándoselo acto seguido al Cabecilla mientras gritan "¡¡¡¡El de los Rivers!!!!" [ya sé que son complejas, pero es muy importante que hagáis un pequeño esfuerzo y os memoricéis las expresiones, si no no surten efecto].

Una vez el Cabecilla ha saciado su sed de Ríos, otro debe de olvidar momentáneamente que el de los Rivers no se ha ido a Madrid, y debe mirar a su alrededor, atolondrado, hasta preguntar con toda el alma: "¡¡¡¡¿El de los Rivers?!!!!", y entonces los demás deben de descubrir que el de los Rivers sigue ahí al pie del cañón como todos los tíos grandes, y pasarle al Rivers gritando, y esto es muy importante, gritando no otra cosa que"¡¡¡¡El de los Rivers!!!!".

Se prosigue así hasta que todos los participantes sacien su sed de Rivers, por lo que es peligroso jugar con gente como vuestro Primo.

Una vez acabado el Pinball, si es que el de los Rivers no se lo ha tomado a mal y ha pasado repetidas veces con un tractor de los suyos sobre todos vuestros cadáveres, se invita a lo que quede del de los Rivers a algún estupefaciente, con cualquiera acertaréis, y se lo monta en hombros de camino hacia una puesta de sol.